Necesitaremos:
- Cordel grueso (de cualquier color)
- Charm en forma de ancla de metal antialérgico para el cierre
- Engarces para cables
- Cordel fino (para el cierre de la pulsera)
Una vez tengamos los materiales, vamos a proceder a hacernos nuestra pulsera o pulseras.
En primer lugar, medimos el cordel más grueso rodeándolo alrededor de la muñeca y añadimos 3 ó 4 cm más.
Cortamos un segundo trozo de cordel grueso de la misma medida que el primero.
Tomamos uno de los pedazos de cordel grueso y doblamos por la mitad para crear un bucle.
Ponemos en los extremos de los cabos uno de los engarce para cables y lo apretamos fuertemente con los alicates para sujetar juntos los cabos sueltos con el metal prensado.
Pasamos el segundo trozo de cordel grueso y lo envolvemos por debajo y a través del bucle del primer trozo de cordel cuerda.(Usar la imagen como referencia). De verdad que parece más complicado de lo que en realidad es.
Una vez que los dos trozos de cordel están enlazados entre sí, aseguramos los cabos sueltos del segundo cordel con otro de los engarces para cables. Antes de apretarlo con los alicates, deslizamos un trozo doblado por la mitad de cordel más fino por la parte de dentro de la pulsera y ya podemos presionar fuertemente el engarce para cables. Éste será el cierre de nuestra pulsera.
Por último, tomamos el charm de ancla y cosemos bien la parte que tiene la anilla al cordel del otro extremo de la pulsera (el que no le hemos añadido la pieza de cordel fino). Y¡voilà!, ya tenéis vuestra pulsera marinera bien chula para vosotr@s, para venderla o para hacer un regalito.
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