Esta idea de AlphaMom para fabricar unos jabones de nieve que simulan un paisaje nevado les va a encantar a los peques y van a estar deseando bañarse con ellos, sobre todo si os han ayudado un poquito. También es un regalo estupendo para un babyshower o para un cumpleaños. Eso, sí, tened cuidado de no dejarlo a su alcance pues alguno se lo podía llevar a la boca, por eso os aconsejo hacerlos de colores que no se asocien a comida, como por ejemplo en azul. Se hacen bastante rápido, son fáciles de elaborar y se tarda más o menos lo mismo que en preparar unos helados.
Ingredientes:
- Primero, necesitaremos algunos juguetitos o figuritas muy pequeñitos, lo suficientemente pequeños como para que queoan dentro de los huecos de una cubitera de hielos. Valdrían, por ejemplo, las sorpresas que salen en los roscones pequeños o en los huevos de chocolate. Que elijan vuestros peques los que más les gustan.
- También deberemos tener unos bloques de glicerina sólida de color blanco transparente.
- Colorante para jabones de color azul.
- Si queréis le podéis añadir un poco de glitter o brillitos de color blanco para que parezca nieve.
- Una pastilla de jabón blanco, mejor que no tenga olor a vainilla o a algo dulce, que ya sabemos el peligro que tiene.
- Un cazo o cazuela.
- Una cuchara para revolver.
- Una bandeja de plástico o silicona para cubitos de hielo grandes y rectangulares.
- Unas pinzas de depilar.
- 1 palillo para dientes.
La otra mitad de la pastilla de jabón la rallamos rallamos en otro recipiente aparte. Estas virutas no las vamos a derretir porque las pondremos en los jaboncitos para que simulen el suelo.
Una vez derretida la glicerina, vamos a añadirle dos gotas del colorante azul para que simule el azul del cielo y vamos a echar un poquito de glitter blanco para que parezca que está nevando. Si queréis un color más intenso le podéis añadir alguna gota más de colorante.
Ahora vamos a verter la mezcla de glicerina y jabón derretidos -con cuidado porque estará muy caliente- en los huecos de la cubitera de hielo sin llenarlos del todo -dejando 1 centímetro aproximadamente hasta el borde- para que quede espacio y poder poner unas virutas de jabón y otro poquito más de glicerina que deje "sellado" el jabón de nieve por abajo y no se escapen las virutas.
Metemos la banedeja de hielo con los jaboncitos ya hechos en el congelador de nuestro frigorífico durante 30 minutos aproximadamente. Sacamos la bandeja, dejamos reposar otra media hora y ya podemos desmoldar los jaboncitos con cuidado, sacándolos de los huecos de la misma manera que haríamos con los hielos.
¿A que son una monada estos jaboncitos y da pena usarlos? Seguro que vuestros enanos no van a querer salir de la bañera.
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